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Sábado

Otro sábado... 

Día 24, wow... EL tiempo corre, ya falta menos. Ni sé si ponerme contenta o hacer de cuenta que no pasará nada. Sin embargo, el tiempo no miente y mucho menos se detiene. 😲

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Cuando tenía veinticuatro años de edad aun estaba trabajando en el mejor lugar del mundo, al menos para mi, así lo era. CICESE, es un Centro de estudios superiores: maestrías y doctorados, de todas las especialidades que te puedas imaginar. También hacen investigación aplicada y eso es realmente interesante.
Yo era asistente administrativa pero uh, sí que aprendí cosas muy interesantes. Estuve en el área de Oceanología, conocí los pastos marinos, je...tomé cursos de primeros auxilios y recuerdo que también nos dieron un curso de ammm, ¿cómo se llama? amm... de bomberos pues,  para utilizar el extintor.
Acabo de recordar una anécdota 💡. En ese curso de primeros auxilios, acudieron varios de mis compañeros de trabajo entre ellos Miguel Ojeda, yo le decía Miguelón, callado, pecoso, creo pelirojo, la cuestión es que nos estaban enseñando a cómo tomar la muestra para el azúcar, o sea, hacer el pinchazo en el dedo y tomar la gotita de sangre. Okay, tome su dedo lo pinche salió la sangre y el pincho mi dedo, 1... 2... 3... 4... veces!!! jajajajaja... ¡¿qué le pasa?! No inventes morimos de risa, y mi dedo quedo totalmente adolorido por el resto del día. Ya sé, para mi fue super chistoso.

Ay, era padre tener veintitantos, trabajar en un lugar padrísimo y aprender cosas ¿lo extraño? Sí, pero claro lo que uno extraña es eso: lo vivido. Y ¿entonces? No debería extrañarlo si ya lo viví y lo disfrute. Creo que la edad hace que uno se ponga nostálgico. 😄😄😄